La federación sueca de balonmano ha presentado a Michael Apelgren como el nuevo seleccionador nacional para el próximo ciclo olímpico. El técnico del Pick Szeged era el gran favorito a relevar a Glenn Solberg en el cargo.

Apelgren se hará cargo de la selección sueca después de dos temporadas como técnico asistente de Solberg y compatibilizará su nuevo cargo con el de entrenador del OPT-Bank Pick Szeged, al que dirige desde este verano. Una situación peculiar al ser el único seleccionador de un país que opta a medallas que no se dedica en exclusiva a la selección.

El que fuera central del BM Granollers y del Puerto de Sagunto debutará al frente de Suecia en la semana de selecciones del 4 al 10 de noviembre y tendrá el Mundial de 2025 del próximo mes de enero como primer gran reto.

"Quiero seguir viendo a Suecia donde ha estado en los últimos años. Debemos estar decepcionados cuando caigamos en cuartos de final en un campeonato, debemos estar orgullosos cuando ganamos medallas. Esa es mi ambición y confío en que los jugadores la compartan. Luego hay que respetar el hecho de que hay una gran igualdad en la élite mundial y no hay mucha diferencia entre los ocho primeros equipos ocho, a veces un tiro al palo puede ser la diferencia entre pasar a cuartos de final o tener que jugarse las medallas".

"Michael era un candidato obvio por la experiencia que ha acumulado con la selección nacional, conoce la federación, así como a los jugadores y a los dirigentes, y reúne las máximas cualidades que deseamos de un seleccionador. Estamos contentos de haber podido mantener un buen diálogo con él y con el OTP Bank-Pick Szeged, en el que hemos encontrado una solución que beneficia al club, a Michael y a la selección nacional, tanto a corto como a largo plazo. Michael se basará en el trabajo que Glenn Solberg ha realizado en los últimos años, en los que el equipo nacional volvió a la cima del mundo y, entre otras cosas, ganó tres medallas en tres años", comentaba la manager de la selección Hanna Fogelström.

La renuncia de Glenn Solberg a la selección sueca, a pesar de tener contrato, obliga a Suecia a comenzar una nueva etapa cuando el proyecto parecía totalmente consolidado. El técnico noruego devolvió a Suecia a la élite del balonmano de selecciones y Apelgren deberá mantener la exigencia de un país con una gran generación de jugadores.